Me encanta el chocolate pero no soy muy aficionada a los postres «de chocolate». Aunque siempre hay excepciones. Y, en mi caso, la excepción es el brownie. Me gusta muchísimo. Tanto que no lo hago a menudo porque sería capaz de zampármelo entero yo sola de una sentada…¡para desgracia de mis hijos!
Cuando lo hago sigo esta receta que tengo desde hace años. No cambio nada porque me gusta el brownie clásico de toda la vida. No recuerdo de dónde salió. Desde luego que no es una receta familiar porque yo no comí brownie hasta los veintitantos y una vez ya independizada. Posiblemente provenga de una revista, del envoltorio de algún producto o de alguna ficha de esas que suelo coger en los supermercados.
Está riquísimo templado con un ganaché ligero de chocolate y una bola de helado de vainilla.
Necesitamos
- 2 huevos
- 200 grs de azúcar
- 100 grs de chocolate sin leche troceado
- 100 grs de mantequilla (también se puede usar margarina)
- 200 grs de harina de trigo
- 1 1/2 cucharada de levadura en polvo
- 100 grs de nueces peladas y troceadas
Preparación
Pre-calentamos el horno a 180 ºC.
Batimos los huevos con el azúcar hasta que obtengamos una crema ligera y ligeramente espumosa.
Fundimos el chocolate junto con la mantequilla, al baño María o en el microondas (a golpes de 30 segundos y removiendo entre golpe y golpe para que no se nos queme).
Mezclamos el chocolate fundido y la mezcla del huevo. Removemos bien.
Añadimos la harina, la levadura y las nueces.
Engrasamos un molde de horno (el mío de 12×25 cms), vertemos la mezcla y horneamos durante 30-35 minutos. Yo lo dejé 30 porque me gusta que quede jugoso por dentro pero, si te gusta más hecho no tienes más que dejarlo 5 minutos más.
Dejamos que se enfríe antes de desmoldar y…¡atacamos sin piedad!
Cooking at home dice
Parece fàcil, lo intentaremos